El señor de los djinn, de P. Djèlí Clark

El señor de los djinnYa comenté Ring Shout, una novela de P. Djèlí Clark que se retrotraía a los tiempos fundacionales del pulp y las historias superheroicas para plantear una fantasía oscura con una mitología bastante original. Un año más tarde (2022), la editorial Duermevela publicó El señor de los djinn, una nueva historia de fantasía con un componente de ucronía más profundo y, hasta cierto punto, singular; lejos de trabajar sobre el escenario histórico/cultural dominante, sitúa el argumento en un Egipto convertido en una potencia global después de que la magia haya regresado a nuestro plano. Un entente con las criaturas de la tradición árabe ha permitido al país liberarse del yugo colonial hasta establecer un orbe de influencia que ha desplazado al resto de potencias (las participantes en la Primera Guerra Mundial).

Este nuevo orden mundial tiene su recorrido bien avanzado el libro. El señor de los dijinn se abre con el relato “Muerte de un djinn en El Cairo”, con un alcance más limitado, mucho más local. Aunque no es indispensable para disfrutar de la novela, su emplazamiento introduce un elemento importante en la resolución de la trama. En este mercado donde acceder a relatos se hace cada vez más complicado, es un valor añadido a cualquier libro. Además es una agradable presentación del escenario y su protagonista: Fatma el-Sha’arawi; la agente más joven del Ministerio de Alquimia, Encantamientos y Entidades Sobrenaturales obligada a resolver el asesinato de un ángel por una causa más allá de quitarle de en medio.

Pongo entero la etiqueta de la entidad para la cual trabaja porque ahí está lo más disfrutable del relato y la posterior novela: el lugar narrativo que construye P. Djèlí Clark. Un Egipto a pie de calle donde la vida cotidiana ha sido transformada por la presencia de seres preternaturales. Coexisten diversas mitologías y creencias: las dominantes en Egipto (los musulmanes representados por la agente), las sectas menores (el culto hacia los viejos dioses de Egipto entre las clases más pobres, que parecen de regreso), las principales en otros lugares (Alemania con su propio acuerdo con sus criaturas; la negación que existe en EE.UU.)… Esta faceta de fantasía se vincula con una social donde, a pesar de los avances, los problemas de racismo y machismo se perpetúan. Incluso en los lugares más avanzados, hay anclas que se aferran a los viejos modos.

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Ring Shout, de P. Djèlí Clark

Ring ShoutEn ese parque temático en que se ha convertido el horror lovecraftiano, Territorio Lovecraft ampliaba la superficie del lugar con una serie de “atracciones” orientadas a poner de manifiesto el racismo en los EE.UU. y detrás de sus mitos fundacionales. Concebido como un falso fix-up, el libro de Matt Ruff ponía en su centro a personajes afroamericanos y los horrores a los que se enfrentaban (y todavía se enfrentan) para zambullirlos en las narraciones de Weird Tales, sus temas, sus caracterizaciones, convenientemente reinterpretados. Inevitablemente, al apostar por esta inspiración plantaba en la habituación un elefante problemático: gran parte de su propia cultura, más allá de sus sacrificios y adaptaciones para sobrevivir en la América de Jim Crow, quedaban fuera de la representación. Ring Shout viene a enmendar esto.

P. Djèlí Clark cuenta la historia de un trío de mujeres dedicadas a cazar miembros del KKK en los primeros años de la ley seca. La narradora, Maryse, puede ver a los Ku Kluxes bajo su verdadera forma: unas criaturas provenientes de otra dimensión que han colonizado a miembros del Klan y se alimentan de su odio y su violencia. Su presencia en este mundo se materializó en un ritual cerca de Stone Mountain, Georgia, a mediados de la década anterior y sus filas crecieron aupadas por el éxito de El nacimiento de una nación. La película de D. W. Griffith, con su intensa poética, su sesgo supremacista blanco y, aquí, un poco de ayuda mágica, sedujo a muchos de sus espectadores. Armada con su espada y acompañada de dos camaradas, Maryse recorre el estado de Georgia en busca de miembros del Klan para eliminarlos antes de que linchen a otros afroamericanos.

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