La rata de acero inoxidable, de Harry Harrison

La rata de acero inoxidableEn esta recuperación exprés de Harry Harrison afrontada por Minotauro este 2024, para el segundo volumen han elegido la opción a priori más sensata de las que había disponibles. Una vez que Bill, héroe galáctico era inelegible después de recuperarla Gigamesh hace una década, se han decantado por La rata de acero inoxidable. El inicio de una serie de once novelas de lectura independiente en la cual el autor de Mundo muerto y Al oeste del edén se arrojaba en los brazos del thriller de espías, de moda en el mundo de la guerra fría, aportándole un entorno de space opera escorada hacia el relato de pícaros. ’nuff said

Esto se hace evidente desde el primer capítulo, el momento de presentación de Jim de Griz después de que le hayan pillado en pleno butrón. Sumamente inteligente, rey del disfraz, hostil a cualquier forma de jerarquía, siempre necesitado de nuevos estímulos que eviten su aburrimiento, de Briz está condenado a encontrarse con la horma de su zapato en varias ocasiones. Primero, cuando cae en una celada de los Cuerpos Especiales, el MI6 que mantiene la paz en la Galaxia para el cual terminará trabajando. Y después cuando descubre un plan secreto para construir una gigantesca nave de guerra. Un subterfugio puesto en marcha por el personaje que será su némesis durante el resto de la novela y le llevará hasta el límite. Esto supone huir de los Cuerpos Espaciales, escapar por los pelos de una muerte segura, quedar inconsciente varias veces, y terminar en un escenario a la mayor gloria de El prisionero de Zenda. Todo en poco más de 200 páginas de letra y márgenes generosos.

Sigue leyendo