No me voy a andar con demasiados preámbulos, toca otra crítica negativa. Con lo que van tres novedades seguidas cantando bastos, algo que me inquieta un poco. Primero, porque me estoy dando cuenta de que la ficción cada vez me provoca más pereza y cansancio, lo cual es posible que esté afectando a las reseñas. Segundo, porque a este paso voy camino de convertirme en una autoparodia, el Don Cicuta del fándom (los más jóvenes que pinchen en el enlace) y tercero, pero no menos importante, porque aunque esta reseña que van a leer no sea más que ooooooootra opinión de un notas en internet, pues la verdad es que no me agrada dar palos al trabajo y esfuerzo de una serie de personas a lo largo de un extenso período de tiempo. Incluso me da cargo de conciencia. Menos mal que a los críticos, sobre todo a los aficionados, nadie nos hace ni puñetero caso, ¿verdad? ¿VERDAD?
Farishta, de Marc Pastor
4